lunes, 3 de septiembre de 2012

HIPC, Heavily Indebted Poor Countries



HIPC, Heavily Indebted Poor Countries
Comité para la Anulación de la Deuda del Tercer Mundo (CADTM)

Iniciativa para reducir la deuda externa de los Países Pobres Altamente Endeudados (PPAE).
La Iniciativa HIPC Original fue aprobada en septiembre de 1996 por la Junta de Gobernadores del FMI y la del BM, al objeto de proporcionar asistencia excepcional a los países que apliquen políticas económicas apropiadas, con el fin de reducir la carga de su deuda externa a niveles sostenibles, es decir, a niveles que permitan hacer frente al servicio de la deuda con los ingresos derivados de la exportación, la asistencia financiera y las entradas de capital. Esta asistencia supondrá una reducción del valor actual neto (VAN) de los créditos del país endeudado

La Iniciativa HIPC tiene por objeto ayudar al país beneficiario a alcanzar una situación de deuda sostenible a largo plazo. El objetivo de sostenibilidad se intenta conseguir mediante la aplicación de tres elementos: la reducción de la carga de endeudamiento; la adopción de programas de ajuste y reforma; y el reparto equitativo del esfuerzo entre todos los acreedores: bilaterales oficiales, multilaterales y comerciales.

Los Directorios del FMI y del BM consideran una lista de 41 países elegibles para ser incluidos en la HIPC, esto es, las economías más pobres y endeudadas según dos criterios: elegibilidad para recibir financiación en términos IDA del BM y tener un nivel de endeudamiento insostenible. La lista de países se cerró en el año 2004, aunque no se descarta, en situaciones excepcionales, poder incluir algún país más.

Con la adopción de la Iniciativa HIPC Reforzada en 1999 se buscó ofrecer una condonación de deuda de mayor cuantía, más amplia y más rápida a los países pobres que demuestren un compromiso real de estabilidad, reforma y reducción de la pobreza. Especial hincapié se hizo en el estrechamiento del vínculo entre el alivio de la deuda y la reducción de la pobreza y, de hecho todos los países que soliciten asistencia en el marco de la Iniciativa deberán: (i) haber adoptado, al llegar al punto de decisión, el ya mencionado documento de estrategia de lucha contra la pobreza (PRSP) y (ii) haber avanzado en la aplicación de esta estrategia, durante por lo menos un año, al llegar al punto de culminación.

No obstante, la HIPC por sí sola no implica la viabilidad financiera de estas economías. De hecho, incluso si se condonase toda la deuda externa de estos países, la mayor parte de ellos todavía seguiría dependiendo de niveles significativos de asistencia externa en condiciones concesionales ya que, de hecho, durante muchos años la magnitud de esa ayuda ha sido superior al monto que representan los pagos del servicio de la deuda.

Esta Iniciativa es el eslabón más reciente de una cadena que se inició a finales de la década de los 80 cuando se puso de manifiesto que el alivio de la deuda que estaba concediendo el Club de París resultaba insuficiente, por lo que los acreedores comenzaron a incluir condonaciones de deuda en sus negociaciones con los países deudores.

La Iniciativa supone pues la consolidación de un esfuerzo, por parte de la comunidad internacional, para lograr la sostenibilidad de los países más pobres altamente endeudados que estén demostrando un compromiso serio de estabilidad macroeconómica y de reformas estructurales. Tanto el BM como el FMI han optado por aplicar programas económicos específicos en los casos donde los mecanismos tradicionales de alivio de la carga de la deuda antes mencionados resulten insuficientes.